Innovando juntos: bajo la dirección de la División Industrial Services ha sido posible desarrollar en breve tiempo una junta de perfil extrusionada, lista para su lanzamiento al mercado, que se usa en la producción de hidrógeno por electrósis alcalina. En un segundo paquete de proyectos, los participantes planean lograr ahora importantes desarrollos para la próxima generación de electrolizadores.
“Hidrógeno, el material del futuro descarbonizado”. Es uno de los titulares de una guía redactada por la División Industrial Services para la industria química. Este documento describe las capacidades de desarrollo de Freudenberg Sealing Technologies (FST) para las distintas aplicaciones del hidrógeno.
FST demostró en un proyecto para un cliente que estas manifestaciones no son una mera cuestión teórica, sino una realidad práctica actual. Para un conocido fabricante europeo de electrolizadores alcalinos, el departamento técnico de la División Industrial Services desarrolló una solución de junta en estrecha colaboración interdisciplinar con el Lead Center Special Sealing Industry (LC SSI), Freudenberg Technology Innovation (FTI) y el cliente.
El proceso no solo se caracterizó por tener una apretada agenda. Encima de esto era muy restringido el grado de libertad en el diseño de la junta para las pilas de los electrolizadores existentes, pues el espacio de construcción estaba definido. “Nos sumergimos de lleno en los detalles, hicimos un montón de cálculos y de ensayos. De esta manera conseguimos mejorar el diseño de la junta de perfil existente”, explica Mark Boggasch, Technical Service & Innovation Global Process Industry. A simple vista se puede reconocer el cambio del diseño plano original del producto de la competencia empleado hasta entonces hacia una configuración geométrica de la junta de perfil más bien abombada y redondeada. “Con esto se aumentó la cobertura funcional con las partes en contacto, reduciendo a la vez la crítica obturación de la hendidura del modelo de partida”, explica Boggasch.
La segunda prioridad de desarrollo se centró en el material de sellado, concretamente en encontrar un sustituto sostenible, duradero y efectivo para el nocivo amianto. El desafío: en los electrolizadores alcalinos, el material de sellado debe resistir la potasa cáustica altamente concentrada y asimismo el oxígeno, el cual es un “acelerador del envejecimiento”, y ofrecer una durabilidad prolongada a pesar de la enorme presión y las altas temperaturas.
Oliver Arnold, Senior Specialist Material Engineering LC SSI, y también el Dr. Robert Rotzoll, Business Development Manager Global Process Industry, analizaron de inmediato la gama de materiales de FST. En el breve plazo disponible, el elastómero EPDM resultó ser la solución ideal en ese momento. Éste presentó, en los ensayos de almacenamiento realizados expresamente, una mejor resistencia a la potasa cáustica y al oxígeno que el material de la competencia.

500 Kilómetros al año
El tamaño requerido de las juntas indicó que lo mejor era producir un perfil extrusionado continuo: en la aplicación en cuestión, un solo perfil mide aproximadamente cinco metros de longitud por cada celda electrolítica. “A largo plazo prevemos una producción anual de 500 kilómetros”, estima Rotzoll. Actualmente (datos de finales de septiembre) las juntas están en poder del cliente para su posterior evaluación, y ya hemos recibido el primer pedido de producción en serie.
Pero la cosa no queda ahí. Poco después de la toma de contacto inicial se hizo patente que el cliente está interesado en una mayor colaboración con FST con vistas a la próxima generación de electrolizadores. “Estamos definiendo los contenidos y las condiciones de este segundo proyecto de desarrollo, el cual es sensiblemente más voluminoso”, explica Wulf Geiselhart, Technical Service & Innovation Global Process Industry. Entonces FST va a poder aplicar sus conocimientos también en el diseño del reborde de la junta –para perfeccionar el sistema en su conjunto–.
Se pronostica una explosión en la demanda de hidrógeno como “material del futuro descarbonizado” en la industria química, además de servir de fuente y almacenamiento de energía renovable y carburante para pilas de combustible. Visto lo cual, estos proyectos básicos de desarrollo con clientes son cruciales para el futuro de FST. El equipo encargado del proyecto está de acuerdo en que “innovando juntos” permite adquirir experiencia con el cliente, aprender y desarrollarse. Adicionalmente, estos proyectos son una buena carta de presentación y son testimonio de la competencia en desarrollo. No quedarse inmóvil, sino avanzar y fijar hitos en los nuevos campos de aplicación, todo esto forma parte del ADN de FST.