En los vehículos –prioritariamente en aquellos con propulsión eléctrica e híbrida recargable– urge proteger las piezas electrónicas contra las interferencias electromagnéticas. Esto se logra muy fácilmente usando carcasas y tapas de plástico. Mientras las piezas de aluminio empleadas hasta ahora son electroconductoras por naturaleza, por su parte, el plástico debe “aprender” esta función. Para conseguirlo, Freudenberg Sealing Technologies (FST) ha desarrollado varios procedimientos.
Uno de ellos es el denominado EMI Coating, es decir la aplicación de un revestimiento electroconductor sobre la superficie de la carcasa plástica. En esto está trabajando actualmente FST con BASF. Para este fin ya han suscrito un contrato de cooperación. “Juntos queremos superar los desafíos técnicos que surgen con la utilización del plástico en la electromovilidad, por ejemplo, reacción ante el impacto y el ruido (es lo que se conoce por NVH, sus siglas en inglés, o ruido, vibración y aspereza). Adicionalmente queremos colaborar en la adquisición de clientes”, explica Volker Schroiff, Director Technology Management.
Tras la firma del contrato en junio, los responsables intercambiaron impresiones en la terraza del nuevo BASF Creation Center localizado en Ludwigshafen. Por parte de Freudenberg cruzaron el río Rin el Dr. Matthias Sckuhr, Volker Schroiff, Ralf Schmid, Matthias Hauer y Andrea Bloch (del departamento jurídico de Freudenberg & Co.).
A la cabeza de la delegación de BASF estuvo el Dr. Guiscard Glück, Vice President, del departamento de I & D de Engineering Plastics Europa.